Tadao Ando es considerado uno de los mejores arquitectos japoneses. Su estilo arquitectónico japonés tradicional, en armonía con el estilo moderno, no deja de ser tendencia y así lo demuestran sus premios Praemium Imperiale (1996), Premio Kioto (2002), Premio Pritzker (1995), entre otros, pero ¿qué más distingue a las construcciones de este arquitecto japonés autodidacta?

- Emprende cada proyecto con mirada crítica, sensibilidad y comprensión.
- Considera el cielo como uno de los elementos más importantes de sus obras.
- Integra sus edificaciones en el entorno natural y a la naturaleza dentro de las edificaciones.
- Se basa en tramas geométricas simples para el ordenamiento de sus espacios.
- Aprovecha la luz natural para crear espacios trascendentes para la introspección, meditación, serenidad y espiritualidad.
- Emplea hormigón liso con marcas visibles en el encofrado para crear texturas y planos-murales que sirvan para captar la luz natural y permitir el paso del tiempo.
- Rechaza el materialismo consumista, de manera que hace uso limitado de materiales y emplea los materiales de la actualidad con sencillez y para generar sensaciones positivas.
- Crea espacios interiores cerrados.
Su lema es: “Pienso que la arquitectura se torna interesante cuando se muestra este doble carácter. La máxima simplicidad posible y, a la vez, toda complejidad de que pueda dotársela”.
Obras de Tadao Ando más relevantes:
- Casa Azuma (Osaka): con la cual recibió el premio de la Asociación Japonesa de Arquitectura (1976). A partir de esta construcción, la opinión pública comenzó a sentirse atraída por sus edificaciones.
- Rokko Housing I (Kobe): complejo de viviendas como contribución voluntaria tras el terremoto de Kobe en 1995. Junto con este proyecto, Ando también participó en el reordenamiento del frente marítimo de Hyogo.
- Entre otras de sus tantas obras destacan: la Capilla sobre el agua de Tomanu, la Iglesia de la luz de Ibakari, el Museo de Arte de Hyogo y el Museo de los niños de Himeji.
